"¿Qué quiero en realidad?", me preguntaba el otro día. Todavía no lo sé a ciencia cierta, sólo puedo llegar a atisbar qué me gusta, qué es lo que me hace sentir vivo.
Quiero leer a todas horas; leer poesía: a lord Byron, a Charles Baudelaire, a Walt Whitman, a Robert Frost, etc.; leer novelas: bélicas, negras, de fantasía...; leer teatro: Shakespeare, Calderón de la Barca, y demás. Quiero verme sentado, en un futuro, en un sillón frente a una chimenea junto con mi perro, un labrador, al que llamaré "Hamlet", mientras leo una buena novela.
Quiero pasear por bosques, a través de senderos de tierra; acariciar al viento cada vez que extienda mis brazos mientras me hallo en un acantilado, a un paso del abismo; respirar aire puro en las montañas; admirarme una vez más con la belleza del inmenso mar azul; sentarme en la hierba, en medio de la naturaleza, para poder meditar y sentir cómo fluye la vida a través de la madre tierra.
Quiero reírme, la chispa de la vida y de la felicidad, con mis amigos, con mis seres queridos, a todas horas; quiero estar con mi familia, sentir esa calidez que sólo ellos te pueden dar; quiero tener una sonrisa las 24 horas del día, incluso cuando esté durmiendo, pues eso significará que tengo un sueño plácido.
Quiero coger de la mano a esa persona especial y pasear hasta el fin de los días con ella, sin mediar palabra, solamente nuestras esencias serán las que articulen las palabras sin sonido; mirarla a los ojos, y descubrir, entonces, la verdad del mundo, la verdad del universo... descubrir mi existencia en sus pupilas; observar cómo sonríe cada vez que gasto alguna broma o cuento algún chiste; quiero sentirme el hombre más feliz del mundo cuando esté con ella.
Quiero desprenderme de este cuerpo terrenal, que mi alma vuele libremente hacia los lugares más ignotos, a los planetas y galaxias más lejanos; que ésta surque los mares y cielos, sobrevolar los parajes olvidados por el hombre, alejarme de este mundo, llegar a ver lo que nadie ha visto...
Quiero saber lo que nadie sabe, averiguar lo que apenas intuyo; quiero tener el conocimiento supremo, llegar al mundo de Platón y descubrir una luz que muy pocos pueden llegar a ver en este mundo de sombras.
Quiero... vivir.
"Este vídeo y su contenido no son de mi propiedad, sino que la pieza musical Reaching pertenece al grupo musical Audiomachine".
Jo si tingués un gos l'anomenaria Pericles.
ResponderEliminarMolt bò, continua així!
Ja, ja, ja, ja
EliminarGràcies, Aitor! Aixó intentaré!